lunes, 23 de junio de 2008

... yo te escribi esto

A veces siento que te quiero más que a nadie.
Como jamás he querido a una persona nunca.
Que esa vez, firmé mi condena.
Cuando te vi solo en una mesa para cuatro… solo entre muchas mesas. A la luz de una solitaria y rústica vela. En medio de la música, de declamaciones y humos de cigarro y otras cosas.
Te vi (supe que eras tú) y quise salir corriendo. No supe que hacer me quedé un momento observando, mientras me debatía entre huir o acercarme… y aceptar lo que venía.
Ahí parada. Absurda.
Y es que en ese mínimo instante en que te vi supe que no habría escapatoria. Que la maldita gravedad y el tiempo y todas esas cosas… Como si fueras Júpiter… y yo un (fucking) asteroide de la vía láctea.

Supe que estaría condenada a ti.
Atada a ti, como si de mi piel, de mi cuerpo, justo en medio del pecho, saliera un cordón viscoso, un tejido orgánico, algo que me ataba a ti, que se pegaba a tu cuerpo a la distancia, y me obligaba a seguirte, a mantenerme cerca. A estar en paz sabiéndote cerca. Girando en torno a ti. Como si fueras Júpiter. Lleno de nada. De vacío. Pero amarrándome, acercándome, trayéndome hacía ti sin que ni siquiera lo supieras.

Y desde ese día quise estar cerca.
Y cada vez que veo que estas así un poquito cerca, pero casi, casi yéndote me doy cuenta de que te quiero. De que estás ahí, al lado pero no, y que te quiero de una manera extraña, sin sentido pero horrorosamente mucho. Y que me aterra no estar cerca. Y que por eso, solo por eso y por poder decirte mil veces más, muchos días más, que te quiero, yo podría volcar mi vida entera, girar en 180 y todas esas cosas que se dicen siempre. Invertir el caudal de un río… clichés varios, metáforas cursis repetidas…

Pero no siempre estoy dispuesta.

No siempre podría. Mi vida. Ese hilo de vida que corre sin sentido alguno, sin origen ni final, sin una minima dirección, un hilo ínfimo, demasiado delgado como para ser vida, como para ser algo, como para ser serio como le llamas… No quiere verse envuelta de pronto y así de bruces entre los brazos del océano. Pero tú ya eres río.
Y yo siempre tan niña…
Siempre tan eternamente incompleta…
Y tu te vas alejando… lentamente te vas viendo completo… te vas viendo el hombre serio… te vas viendo esa persona que yo no alcanzo a ser. Y que muchas veces ni quiero.
Y por eso tantos…
Por eso lo mismo.
Por eso siempre y nunca todo el tiempo.

Y por eso te quiero, Porque te apareces como un Júpiter gigante al lado de mi enana vida.
Un Júpiter hermosamente misterioso por descubrir.
Un Júpiter que se esconde en sus incesantes nubes. Giros, giros, giros. De nubes. Que tapan.
Que cambian, que quieren borrar todo y seguir adelante. Ciego. Testarudo. Incesante.
¿Hacia donde es adelante en el vacío?

Pero hay una cosa. Eres hombre, eres planeta, eres una gran vida.
Y yo soy sólo una Pevensie tras el Gran León.
(Ojalá fuera otra Lucía…
ah entonces sería tu musa, tu vuelo, tu viento, tu vino…
pero ni tu ni yo somos personajes de novela.)

Y por eso -porque sueño- cada vez de nuevo y otra vez.
Y para mi es el comienzo, el alcance de algo, el instante hermoso.
Y para ti es final. Punto aparte. Cambio de hoja.
Y vuelves a tus nubes…
Porque siempre buscas llegar, y quedarte. Buscas el Mi
Anhelas estar verdadera y ciertamente vivo.
En esta tierra. (Aunque eres un planeta)
Y yo solo soy un pequeño arroyo que fluye sin rumbo y muchas veces se detiene sin motivo.
Y de pronto todo pierde el sentido. De pronto qué estamos hablando y para qué seguir con el cuentito. De pronto es mejor callar. Olvidar. Dejarse de jueguitos.
Pero soy tan tercamente niña. Y un poco loca y un poco idiota también.
Por eso insisto en no dejarte.
Y hasta a veces pienso que esto es mejor que todo.
Que tenerte a veces, un poco y no tenerte siempre, es un abismo hermoso que debería guardar en una cajita.
Y obsequiártela todos los días para que no te perdieras de la vida.
Esa otra que para mi es la vida. Y que bueno para ti es rutina…
Pero tú eres más caleidoscopio.
Para ti esto es cosa de todos los días.
Para mi es el salto, la respuesta, el ping pong con el inconsciente. La evasión y la salida.
Tu… tan planeta hermoso y misterioso que busca ser la tierra.
Pero te quiero, (lo único seguro es que te quiero)
Y cuando digo te quiero de pronto siento que estaría bien ser siempre tu niña-
Que de pronto nada vale más que estar siempre contigo…
y por poder besarte en la mañana
y sentir que somos luz y que el tiempo se detuviera.
y contarte cada vez que es de mi vida
Ser cada vez, en cada momento, tu niña
Recrear una y otra vez la fantasía
y soñar, sí, mentirme un poquito, imaginar que me quieres, que te conozco un poco, que me cuentas tus cosas, que deseas estar cerca.
Sí… que me quieres y deseas estar cerca…. yo quiero ser siempre tu niña…

Pero yo no quiero ríos que desembocan en alguna parte.
Me asusta tu deseo de un Mi permanente.
Soy demasiado no ser como para estar remando,
Remando todo el tiempo.
De pronto, así de golpe un par de pájaros azules…
yo no voy a andar recogiendo gusanos, día tras día…
Una Lucia sin muñeca. Sin Rocamadour. Al final para qué, igual se muere.
Yo se que de pronto este océano del bienestar y de la vida bonita y de la cuenta de los años a ti te agrada bastante y de pronto tal vez lo buscas…
Y a mi me asusta que así sea, porque te alejas y no me dejas espacio en tu vida
para instalarme, para quererte, para regalarte cajitas, para sentirme Pevensie junto al León.
Pero eres mi Gran León, mi Júpiter y tal vez necesitas tu Juno…
De pronto quiero decirte anda, búscala, te deseo suerte.
Pero soy otra vez niña obcecada…
Pero entonces te quiero tanto que a veces lo pienso
Creo que debiera irme con mis sueños y mis abismos a otra parte
Y dejarme de pedirte que seas planeta, caleidoscopio y todo eso.
Pero no quiero.
Quiero un instante. Quiero tu cuerpo.
Quiero ser luz y que no haya tiempo.
Quiero bolitas de cristal con nieve cayendo
y cajitas con abismos dentro.
Déjame con mis sueños. Quiero jugar a cumplir sueños.
Quiero un momento para jugar contigo
Quiero jugar y ser tu niña.

2 comentarios:

Oscar Flores dijo...

Todo se resume en la voz de Tori...

http://www.youtube.com/watch?v=pgOn5GdVfow

Isadora dijo...

emm sip y por lo mismo te odio enormemente... te odio demasiado... cómo puede uno enamorarse de esa manera... como puede uno kerer tanto a una sombra... kerer tanto por tan poco... en fin... estoy loca... es cierto y tb soy un poco masoksta.... pero a mi no me agrada que me digas esas cosas, no me agrada que te andes haciendo el bestia, el ser humano detestable que dices ser... eres una mierda de persona... cómo puedes pretender que siga siendo lo mismo??? yo no puedo, realmente no puedo... aunque kiera... y bueno estoy realmente enojada porque no puedo creer que pueda llegar a sentir esto... yo no debi sentir estas malditas cosas.... en fin,,, y si debimos ser amigos pero a estas alturas yo creo ke no se puede... pudimos haber sido amigos y hubiese sido todo mejor... pero bueno... kisiera olvidar todo esto borrarlo de mi mente y punto... kiero ke tdo sea como antes de todo, antes de lo que desemboco todo esto.